La influencer chilena Naya Fácil compartió con sus seguidores una delicada situación de salud que la obligó a suspender abruptamente sus planes. Durante el fin de semana, reveló que tuvo que ser hospitalizada de urgencia luego de que una infección urinaria asintomática evolucionara en una infección renal que aún no logra ser controlada. Esta noticia causó preocupación entre sus seguidores, quienes han estado atentos a sus actualizaciones desde el hospital.
A través de sus redes sociales, Naya Fácil explicó que su cuadro clínico es más complejo de lo que pensaba, ya que además de la infección, también le fue diagnosticada anemia. Estas condiciones llevaron a los médicos a tomar medidas inmediatas y recomendarle suspender cualquier actividad exigente, incluyendo un viaje a Grecia que ya tenía completamente reservado. La influencer aceptó la gravedad del diagnóstico, entendiendo que su salud debía ser la prioridad.
“Yo hablé con el doctor ayer, le dije ‘doctor, yo tengo ese viaje programado, estadía, todo’, y me dijo, les vuelvo a reiterar: ‘Yo no soy policía para retenerte, pero si tú te vas a ese viaje, esto puede seguir avanzando’”, relató Naya, dando cuenta de la seriedad de su situación médica. Frente a esto, agregó con determinación: “Me da lo mismo perder la plata, mi salud está primero”.
Actualización sobre Naya Fácil
La cancelación del viaje tuvo un fuerte impacto económico para ella, ya que perdió alrededor de 9 millones de pesos en reservas. “Las estadías que tenía reservadas, una de $2 millones y otra de 300 mil, las perdí. Perdí todo, no me quisieron reembolsar ni un porcentaje”, lamentó. “Cancelé el viaje en su totalidad”, concluyó, dejando claro que no hubo margen para recuperar parte de la inversión.
Mientras continúa internada, Naya Fácil compartió con sus seguidores que sigue bajo tratamiento, con la esperanza de estabilizarse pronto. “Me tienen que estabilizar para que lo que tengo no siga avanzando y después de eso me dan de alta... supongo”, comentó. En otro mensaje, mostró su anhelo de retomar la normalidad en su vida con un breve pero emotivo deseo: “Ya no quiero estar aquí, quiero mi casa”.
