En un nuevo juicio en Francia sobre el caso de la desaparición y posible muerte de Narumi Kurosaki, su expareja y único imputado Nicolás Zepeda cambió su versión.
Esta jornada, el chileno reconoció que sí viajó al país europeo para ver a su expolola, con quien terminó a la distancia. "Quería que todo fuera bien. Una continuación más constructiva de nuestra amistad, quería tener respuestas a las preguntas", expuso el joven.
Ahí, el presidente del tribunal François Arnaud le dijo que "usted nunca admitió inicialmente que el propósito de su viaje era volver a ver a Narumu Kurosaki", a lo que Zepeda respondió "absolutamente".
"¿Por qué no proporcionó esta información?", consultó el interrogador, y el chileno aseguró que "creo que me daba un poco de vergüenza intentarlo y quería seguir intentándolo. Yo diría que… Estaba muy asustado. Vi lo que queríamos hacer con esta información, vi que queríamos construir una historia que no era cierta. Tenía miedo de que lo usaran en mi contra. Hubiera sido más fácil decirlo, hoy lo veo más claro".
"Estoy aquí para poner todo sobre la mesa para ustedes. Van a juzgar lo que van a juzgar, pero hoy ya no tengo miedo (...) Si alguna vez mentí, omití, no concreté cosas, lo diré. Durante los interrogatorios me hicieron preguntas, vi intenciones y, a veces, mentí. Lo lamento mucho", cerró Nicolás Zepeda.