Parece un capítulo de House Of Cards.
El Presidente Sebastián Piñera fue multado por la Superintendencia de Valores y Seguros tras hacer negocios recibiendo información privilegiada, y pese a esto, se ha convertido en la candidatura presidencial más votada tras el término de la dictadura.
El periodista Sergio Jara Román publicó el libro “Piñera y los leones de Sanhattan” en donde se recopilan estos turbios episodios del mundo empresarial del país.
Ciper Chile aprovechó e hizo un adelanto de uno de los capítulos en el que Piñera utiliza información privilegiada para comprar acciones de Lan. En el se pueden leer como serían los audios de Piñera, así relata la investigación:
“Lejana y metálica, como si estuviera hablando a través de un viejo radiotransmisor, se escuchó la voz de Sebastián Piñera al otro lado de la línea. Venía recién llegando a su oficina y apenas pudo tomó el control del negocio y comenzó a hablarle al micrófono de su teléfono.
Los tres operadores de Banchile que estaban al otro lado de Santiago atentos a lo que diría, abrieron sus ojos como huevos fritos y pegaron sus mejillas a los altoparlantes del aparato. Mediante infructuosos aletazos al aire trataron de hacer callar a sus compañeros de oficina. Pero el ruido era ensordecedor. Gritos, de todos lados, llamaban a comprar y vender acciones. La testosterona estaba, probablemente, en su más alto nivel, mientras millones de dólares pasaban por las pantallas de los computadores como si fueran bolitas de dulce. En ese infierno, atestado de ego y plata fácil, los tres operadores que atendían a Piñera se peleaban el parlante para escuchar sus instrucciones.
—Quiero tres millones —les dijo Piñera, luego de regatear el precio.
— ¿No me escuchaste? El gringo no quiere quebrar el paquete—retrucó Cristián Araya, el jefe de operadores en Banchile. —Pero hagamos algo. Yo compro todo, los seis millones. Una mitad para mí y la otra para ti.
—Pero, ¿cómo? ¿Eres mi competencia o el intermediador?—respondió Piñera.
—Te dije que el gringo no quiere quebrar el paquete. Yo pongo para tres millones y tú para los otros tres. ¿Entiendes o no? ¿Soy tu competencia o tu intermediador? —sentenció Araya.
Según el periodista Sergio Jara este negocio se puede considerar como “una de las operaciones más oscuras del joven mercado financiero chileno”.
“Por el parlante se escuchó una risita cómplice. Piñera había aceptado la fórmula propuesta por el jefe de operadores de Banchile. Los corredores se palmotearon la espalda y comenzaron a tomar notas desesperados de los últimos detalles, de las últimas instrucciones. Estaban cerrando algo grande, uno de esos negocios que engordan sus cheques de fin de mes…”
Acá la nota completa
Las grabaciones secretas del caso LAN