Ha generado consternación. La histórica fundadora de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Ana González de Recabarren, falleció este viernes a los 93 años provocando conmoción en el país. Sin embargo, para sorpresa de muchos, una de las nietas de la dirigenta, Lorena Díaz, confesó por redes sociales las miserables condiciones de vida vida que tenía previo a su muerte. Ante esto, Ana González permaneció “internada” en una camilla, al interior de una ambulancia.“
En general siempre fue muy buena la atención que recibió la abuela, ella se atendía con el doctor Miguel Puccio cuando él estaba como director del San José, entonces tenía todas las regalías para atenderse. Luego él siguió siendo su doctor de cabecera, pero sin él como director se notó mucho el cambio”, reconoció Lorena. Su nieta cree que esta situación refleja lo indigno que es el acceso a salud en Chile para las y los viejos: “
El sistema de salud de nuestro país funciona mal, no porque sea la abuela: ningún anciano o persona debería llegar a esa situación. Me llegaron muchos comentarios de gente que me contaba que vivió cosas similares con su familia”, añadió Díaz, quien resume que fueron dos días enteros intentando: “Indignante, demasiado”, se descarga. “
Cuando los viejos están así, absolutamente indefensos, es cuando más se agradece un cariño, una palabra, algo de humanidad, pero no, en este caso no hubo nada de eso”, sentenció. La nieta de González añadió que el que
“los viejos se mueran en una camilla o porque no pueden tener atención es desgarrador”. A la vez, cuestionó la falta de reparación integral del Estado hacia las víctimas de la dictadura. “
Muchas veces se malentiende y la derecha critica como si fuera algo solo ligado a indemnización económica, pero no se entiende el daño hecho a los que crecimos sin papás: si nuestros padres estuvieran vivos habrían podido proveer. Se pide la política integral de un Estado que se hace responsable de la necesidad de crear un ambiente para que estas cosas no vuelvan a ocurrir. Es hacerse cargo, no decirlo no más. Es hacer memoria, asegurar que quienes dieron su vida por eso puedan tener acceso a salud, porque es como lo mínimo”, recalcó.
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