Claramente lo que se busca con la Nueva Constitución ha dejado bastante para analizar.
Horas atrás, la idea de modificar la Nueva Constitución tuvo una nueva información polémica, tras dichos de constitucional RN. Cabe resaltar que eso sucedió el lunes, cuando el Pleno de la Convención Constitucional dio el visto bueno al artículo que indica que el agua sea un bien inapropiable. Ello, en una sesión que dejó sorprendentes argumentos para cuestionar la norma.
«Son bienes comunes naturales el mar territorial y su fondo marino; las playas; las aguas, glaciares y humedales; los campos geotérmicos; el aire y la atmósfera; la alta montaña, las áreas protegidas y los bosques nativos; el subsuelo, y los demás que declaren la Constitución y la ley«, es lo que se puede leer dentro de la mencionada norma, siendo tema a debatir.
No obstante, algunos se opusieron a esto en los fundamentos que dieron para la Nueva Constitución. En el caso del convencional de Renovación Nacional (RN), Roberto Vega, se resaltó: “Si en julio del año pasado, (de) un kilo de pan que tiene 10 panes los chilenos pueden comerse nueve y los convencionales podemos comernos 10. Este informe trae un factor que permite que se cree inflación”.
¿Qué sucederá con la Nueva Constitución?
“Todos nos comprometimos en nuestra campaña a generar una Constitución que trajera estabilidad y desarrollo para Chile. Sin embargo la propuesta nos acerca a Ecuador o Venezuela. En cuanto a la nueva categoría de Bienes Comunes y la Naturaleza, nos lleva a que el ser humano está en segundo plano, pues pone a la naturaleza por sobre el ser humano. La poca prolijidad en la redacción hará que los ciudadanos hagan actos reñidos con la Constitución”, indicó luego.
Para complementar con sus dichos, aseveró que “se declara que el agua es inapropiable, o sea no se puede negociar con ella. Por ejemplo, el señor que comercializa agua, no podrá hacerlo. Qué decir de las empresas que venden helados de agua, pues al ser inapropiable, no puede ser objeto de comercio y esa es una máxima legal”. Claramente la Nueva Constitución aún tiene mucho por definir.
