Universidad de Chile transita un fin de semana sin entrenamientos obligatorios debido al receso de la Liga de Primera 2025 por las elecciones presidenciales. Pero el relajo será breve: la próxima semana enfrentará una verdadera final en su carrera por el cupo Chile 2 para la Copa Libertadores 2026, cuando visite a O’Higgins en Rancagua.
El duelo se volvió determinante para ambos clubes, que buscan alcanzar a Universidad Católica en el segundo lugar de la tabla. El partido, que se disputará en el estadio El Teniente, llegará con una novedad significativa que cambia el clima del encuentro: los hinchas de la U volverán a decir presente en Rancagua después de cuatro años de ausencia.
La decisión de O’Higgins con los hinchas de la U de Chile
La decisión, revelada por radio ADN, confirma que O’Higgins pidió a las autoridades autorizar la presencia de público visitante para el trascendental compromiso del domingo 23 de noviembre a las 18.00 horas. La dirigencia rancagüina busca un ambiente vibrante para un cruce que puede modificar el desenlace del torneo.
Para ello, el estadio podrá recibir a 11.650 espectadores, de los cuales 1.500 entradas serán destinadas a la parcialidad de Universidad de Chile. Se trata de un gesto que sorprende en medio de un campeonato marcado por fuertes restricciones en varios recintos del país.
Desde 2021, los fanáticos universitarios no podían asistir al estadio El Teniente cuando su equipo enfrentaba a O’Higgins, por lo que este regreso representa un hito para la hinchada y una señal de apertura por parte del club celeste. Para Universidad de Chile, el apoyo en Rancagua puede ser un impulso clave en un cierre de campeonato donde cada punto pesa como una final.
