La esperada repatriación de Eduardo Vargas a la Universidad de Chile se ha extendido más de lo previsto, generando expectación y revelando detalles financieros inesperados. El segundo goleador histórico de la Roja, actualmente en Nacional de Montevideo, debió solicitar permiso para entrenar con el club uruguayo mientras se define su futuro. La situación ha tomado un giro polémico tras las declaraciones del vicepresidente de Nacional.
Flavio Perchman, vicepresidente de Nacional, calificó sin rodeos la propuesta de Azul Azul por "Turboman" como "ridícula", generando sorpresa entre los seguidores azules. Mientras la negociación continúa, ha trascendido que la oferta salarial de Universidad de Chile a Vargas correspondería a un cuarto de lo que percibía en Montevideo, donde ganaba 80 mil dólares mensuales, según detalló Manuel de Tezanos.
El comentarista Cristián Caamaño analizó el escenario en ESPN, destacando la breve respuesta pública de Vargas ante los rumores. "Lo único concreto en esta historia fue que Eduardo Vargas salió a hablar en redes sociales muy cortito", expuso Caamaño, refiriéndose a un mensaje lacónico del jugador que buscaba desmentir informaciones falsas, como su supuesta partida de vacaciones a Brasil cuando, en realidad, se encontraba entrenando en Uruguay.
¿Qué pasará con Eduardo Vargas finalmente?
Caamaño enfatizó que el deseo de Vargas es regresar a la U. de Chile, pero la responsabilidad de la demora recaería en la directiva de Azul Azul. "Él quiere venir a la U, pero mientras la U no tome el teléfono, que no es del técnico ni la secretaría, son los mandamases", explicó Caamaño, apuntando directamente al directorio. Cabe destacar que el entrenador Gustavo Álvarez ha manifestado abiertamente su interés en contar con Vargas en su plantel, según lo expresó en una reciente rueda de prensa.
A pesar de que Eduardo Vargas estaría dispuesto a reducir significativamente sus ingresos para volver al Centro Deportivo Azul, donde brilló bajo la dirección de Jorge Sampaoli en 2011, obteniendo un bicampeonato nacional y la Copa Sudamericana, Caamaño subrayó que "Eduardo Vargas no puede vivir de las declaraciones. Tiene que vivir del hecho concreto". El delantero tendría que competir por un puesto con jugadores como Nicolás Guerra, Leandro Fernández, Lucas di Yorio y Rodrigo Contreras, quienes no han logrado una regularidad en la presente campaña. El anhelado regreso de "Turboman" sigue en suspenso.