Durante una emisión reciente del programa Todo va a estar bien, transmitido por Vía X, se vivió un momento de tensión inesperado protagonizado por el comediante Arturo Ruiz-Tagle. Lo que comenzó como una conversación distendida y humorística cambió de tono abruptamente cuando se abordó el tema de sus posturas políticas. La conductora del espacio, Ángeles Araya, fue quien lanzó la pregunta que desencadenó la reacción del invitado.
“En una época de tu vida te catalogaron de progresista o alguien más de izquierda, y ahora parece que eres facho”, comentó Araya, marcando el inicio de una intervención que descolocó a los presentes. Arturo Ruiz-Tagle, lejos de evitar el tema, respondió con contundencia: “Jajá, yo sabía que iban a llegar a esa pregunta. ¿Por qué soy facho? ¿Porque fui por el Rechazo? ¿Porque no aguanto que quemen el Metro de la gente pobre? ¿Porque no estoy de acuerdo con los saqueos, la delincuencia y que ocupen al pueblo para llegar al poder y después qué? ¿Qué hicieron con el pueblo?”, replicó, visiblemente alterado.
El comediante continuó su descargo con una fuerte crítica hacia los responsables de los destrozos en el contexto del estallido social. “Le quemaron el Metro a la gente pobre, a la gente de Puente Alto, no quemaron ningún Metro en el barrio alto. ¿Ustedes creen que los cabros que viven allá en el barrio alto estaban preocupados porque ustedes estaban sin supermercado? Le han hecho un daño a la población, creando odio, sembrando tempestad, y ahora tienen lo que tienen”, añadió con evidente frustración.
Dura respuesta de Arturo Ruiz-Tagle
Arturo Ruiz-Tagle también expresó su molestia hacia quienes, según él, se aprovecharon de las movilizaciones para evadir responsabilidades. “Hay que ver lo que tienen. Hueones flojos que ni siquiera fueron a trabajar con licencias médicas. Yo soy del pueblo, no puedo estar apoyando dictaduras”, declaró, reafirmando su distancia con ciertos sectores de la izquierda actual, pese a haber formado parte de ella en el pasado.
Finalmente, evocó símbolos culturales y contradicciones ideológicas que lo afectan profundamente. “En la Plaza Baquedano destruyeron el Museo de Violeta Parra dos veces. ¿Hizo algo Violeta Parra contra ustedes? ¿No hablan de cultura después? Pero a la sede del Partido Comunista, que está a media cuadra, no le pasó nada”, dijo con dureza. Y cerró con una frase dirigida a sus críticos más jóvenes: “Yo que fui de izquierda, ¿me tratan de facho ahora? Unos pendejos que nunca marcharon contra Pinochet. Yo le digo a ese cabro chico que me dice facho que yo marché contra Pinochet y no contra su fantasma”, concluyó, tajante.